¿Cuántas veces es sano tener sexo a la semana? ¿Es un problema si mi pareja o yo no llegamos al orgasmo?
Llegar al orgasmo no siempre es fácil, pero también hay que decirlo, normalmente la dificultad está más relacionada con aspectos mentales que físicos, por lo que no es una misión imposible.
Seguramente te sorprenda lo que te voy a decir, pero es necesario que rompamos ciertas ideas erróneas que tenemos sobre la sexualidad.
Este tema nos afecta y mucho, si te interesa este tema sigue leyendo este artículo y te cuento qué hacer en esta situación.
¿Qué es un orgasmo? ¿Cómo saber si he llegado al orgasmo?
Algunas personas lo describen como un cosquilleo que recorre gran parte de su cuerpo, otras como una explosión mágica de sensaciones.
Lo cierto, es que podríamos decir que un orgasmo, es un conjunto de cambios y reacciones corporales que se producen en el punto más alto de excitación y tensión sexual que se siente ante la estimulación de zonas erógenas, ya sea en solitario o en pareja.
Es la mayor sensación de relajación que el cuerpo puede llegar a sentir.
Para sabes si has llegado al orgasmo, ten en cuenta si se dan estas señales:
- Apretar la mandíbula o encoger los dedos de los pies.
- Hacer expresiones con la cara y/o la boca.
- Respirar agitadamente.
- Sensación de calor en todo el cuerpo y en la zona genital.
- Cerrar los ojos (de hecho, es difícil tener un orgasmo con los ojos abiertos).
- Pequeñas contracciones/palpitaciones en la zona pélvica.
No olvides nunca que cada cuerpo es distinto y que cada persona se expresa de forma diferente. Una mujer lo puede experimentar como un estallido y, otra, como unas cosquillas agradables.
5 consejos para conseguir un orgasmo
- No tengas sexo pensando en llegar al orgasmo, ni te obsesiones si no lo tienes.
Todo el mundo nos dice que en todo encuentro sexual debe existir al menos un orgasmo, nos hace pensar que una relación sexual no es plena si no hay orgasmo, lo vemos como algo obligatorio, y no como una parte de la relación sexual. Y no es así, para disfrutar de una sexualidad plena es importante que nos liberemos de falsas creencias en torno al sexo como esta.
Es muy importante no obsesionarse con llegar al orgasmo porque cuanto más se tenga en mente, lo más probable es que resulte más difícil alcanzarlo.
La clave está en dejar de buscar el placer y permitir que el placer llegue a ti.
- Relaja la mente y estimula tus sentidos
El orgasmo comienza en nuestra mente, y necesitamos que esté correctamente estimulada, pero no enfocada en conseguir algo que puede llegar o no. Se trata de no pensar en él, no esperarlo, no idealizarlo y centrar toda la atención en el momento, en cada caricia, cada estimulación y cada sensación.
Una música estimulante, velas aromáticas, inciensos… Todo es bienvenido para crear un ambiente lleno de estímulos sensoriales.
- Comunica lo que te gusta
No importa si sois muy buenos en la cama o si tenéis sexo todos los días, si no hay comunicación tarde o temprano la relación se verá afectada. ¿Mi recomendación? Diálogo y confianza.
No tengas miedo de comunicarte con tu pareja, de decirle qué te gusta o qué no. Permítete explorar juntos nuevas sensaciones y momentos eróticos. Debemos llegar a tener esa confianza para disfrutar al máximo la sexualidad.
- Explora tu cuerpo
Para que puedas comunicarte con tu pareja y decirle lo que te gusta y lo que primero tendrás que conocerte tú sexualmente hablando. Conocer qué te gusta, cómo te gusta o cuáles son tus tiempos, es indispensable para poder llegar al clímax. Explora tu cuerpo, atrévete a explorar tus sensaciones, tiempos y preferencias.
- Disfruta del momento presente
Algunas personas desean tener un control completo de sus vidas, y ese es uno de los mayores inconvenientes para que puedan disfrutar de todas las sensaciones que su cuerpo les puede proporcionar.
Mi consejo es que practiques Mindfulness para disfrutar más del presente y empieza a prestar atención a olores, percepciones, sensaciones… y que vivas cada momento tal y como se presente.
Una vez que lo tengas, trasládalo al sexo.
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